Cambio Climático

 
Córdoba frente al cambio climático: una ruta hacia la sostenibilidad y resiliencia
 

El Gobierno de Córdoba a través del Ministerio de Ambiente y Economía Circular trabaja activamente en la creación de una agenda integral para combatir el cambio climático. Reconociendo el desafío que representa este fenómeno, se busca adoptar una visión más amplia y coordinada en las acciones, involucrando a diversos actores gubernamentales, el sector privado y la sociedad civil.

En el marco del cambio climático, resulta de suma importancia promover acciones que favorezcan la mitigación de sus efectos. Además, es esencial educar y concientizar sobre los riesgos y vulnerabilidades asociadas al mismo. Asimismo, se deben establecer medidas concretas de adaptación para enfrentar los desafíos que este fenómeno plantea.

La Estrategia Provincial de Córdoba para abordar el desafío del cambio climático, es la elaboración del Plan de Respuesta Provincial, el cual se alinea con los principios establecidos en la Ley 27520 de Presupuestos Mínimos de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático. Esta ley nacional tiene como objetivo establecer un marco normativo que promueva la adecuación de políticas y estrategias a nivel provincial y regional para hacer frente a los impactos del cambio climático.

También busca impulsar acciones concretas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y fomentar la adaptación a los cambios climáticos ya en curso. Además, pretende proteger los recursos naturales y la diversidad biológica, garantizando la resiliencia de los ecosistemas frente a los efectos del cambio climático.

En este contexto, el Plan de Respuesta Provincial, se enmarca en los lineamientos establecidos por la ley nacional. Busca coordinar esfuerzos, recursos y acciones para implementar medidas concretas que contribuyan a la adaptación y mitigación del cambio climático en la provincia. La vinculación entre la estrategia provincial y la ley nacional fortalece el compromiso de Córdoba en la lucha contra el cambio climático y promueve una visión integral y coordinada para enfrentar este desafío crucial.

¿Qué es el cambio climático?

Por definición del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) el cambio climático es la variación del estado del clima identificable (por ejemplo, mediante pruebas estadísticas) en las variaciones del valor medio y/o en la variabilidad de sus propiedades, que persiste durante largos períodos de tiempo, generalmente decenios o períodos más largos. El cambio climático puede deberse a procesos internos naturales o a forzamientos externos tales como modulaciones de los ciclos solares, erupciones volcánicas o cambios antropógenos persistentes de la composición de la atmósfera o del uso del suelo.

https://www.ipcc.ch/site/assets/uploads/2018/08/WGI_AR5_glossary_ES.pdf

La Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC)– en su artículo 1- define el cambio climático como “cambio de clima atribuido directa o indirectamente a la actividad humana que altera la composición de la atmósfera global y que se suma a la variabilidad natural del clima observada durante períodos de tiempo comparables”. La CMNUCC diferencia, pues, entre el cambio climático atribuible a las actividades humanas que alteran la composición atmosférica y la variabilidad climática atribuible a causas naturales. 

 

https://inventariogei.ambiente.gob.ar/

Consecuencias del cambio climático

El cambio climático tiene impactos significativos en diversas áreas de nuestra vida. En términos de clima, se observa un aumento generalizado de las temperaturas, cambios en los patrones de precipitación y eventos climáticos extremos más frecuentes e intensos.

Los ecosistemas se ven afectados por el cambio climático, con la pérdida de biodiversidad y la migración de especies hacia regiones más frescas. Los arrecifes de coral sufren el blanqueamiento debido al estrés térmico, y los glaciares están retrocediendo rápidamente.

En cuanto a la salud humana, el cambio climático está vinculado a un aumento de enfermedades relacionadas con el calor, alergias, enfermedades transmitidas por vectores y problemas respiratorios debido a la mala calidad del aire.

La economía también se ve afectada por el cambio climático. Los eventos climáticos extremos dañan la infraestructura y afectan la producción agrícola y la industria, lo que puede llevar a costos económicos significativos y pérdida de empleos.

Medidas para combatir cambio climático

Para abordar el cambio climático, es necesario adoptar medidas a diferentes niveles. A nivel individual, podemos reducir nuestra huella de carbono adoptando hábitos más sostenibles, como usar transporte público, ahorrar energía, reciclar y reducir el consumo de carne.

A nivel comunitario, es esencial promover el desarrollo de energías renovables, como la solar y la eólica, y fomentar la construcción sostenible. También se pueden implementar programas de reciclaje y educación ambiental.

A nivel gubernamental, se deben implementar políticas y regulaciones que fomenten la transición hacia una economía baja en carbono. Esto incluye incentivos para la adopción de energías limpias, restricciones a las emisiones industriales y protección de áreas naturales clave.

Los acuerdos internacionales, como el Acuerdo de París, desempeñan un papel crucial en la lucha contra el cambio climático al alentar la cooperación entre países y establecer metas concretas para reducir las emisiones globales.

Acciones de mitigación y adaptación al cambio climático: consejos útiles

Reducir la huella de carbono evitando el desperdicio de alimentos y la generación de residuos plasticos de un solo uso, eligiendo opciones de transporte sostenible, como caminar, andar en bicicleta o usar transporte público.

Ahorrar energía en el hogar mediante el uso de electrodomésticos eficientes, ajustando la temperatura y apagando los dispositivos cuando no se usen.

Fomentar la sostenibilidad participando en programas de reciclaje y evitando productos desechables y de un solo uso.

Apoyar la conservación de bosques y ecosistemas naturales, y participar en actividades de reforestación y restauración.

Promover la educación y la conciencia sobre el cambio climático a través del compromiso con organizaciones ambientales y participación en eventos y campañas relacionadas.

links de interés:

Plan Nacional de Adaptación y mitigación al cambio climático:

https://www.argentina.gob.ar/ambiente/cambio-climatico/plan-nacional

Inventario Nacional de gases de efecto invernadero:

https://inventariogei.ambiente.gob.ar/

Educación Ambiental frente al Cambio climático 

Solicitá capacitación sobre cambio climático por estas vías: cambioclimatico.ambientecba@gmail.com o al teléfono 3517643495.

¿Qué es la huella de carbono?

La huella de carbono es una medida del total de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) liberados a la atmósfera como resultado directo o indirecto de nuestras acciones individuales o como organizaciones.

Los principales gases de efecto invernadero incluyen dióxido de carbono (CO2), metano (CH4), óxido nitroso (N2O) y fluorocarbonos (CFC). Estas emisiones contribuyen al fenómeno del cambio climático y el calentamiento global.

Importancia de Calcular la Huella de Carbono

Calcular nuestra huella de carbono es fundamental para comprender cómo nuestras elecciones cotidianas afectan al medio ambiente y cómo podemos tomar medidas para reducir nuestro impacto negativo. Al medir las emisiones, podemos identificar las áreas clave que generan mayores impactos y adoptar acciones efectivas para mitigarlos.

Acá podes calcular tu huella:  https://www.carbonneutralplus.com/calculadora-de-huella-de-carbono-corporativa/

Factores que contribuyen a la Huella de Carbono

Energía: El uso de combustibles fósiles para generar electricidad y el consumo de combustibles en vehículos contribuyen significativamente a la huella de carbono.

Alimentación: La producción y transporte de alimentos, especialmente de origen animal, liberan una cantidad considerable de GEI.

Transporte: Las emisiones generadas por viajes en avión, automóvil u otros medios de transporte se suman a nuestra huella de carbono.

Consumo de bienes: La fabricación y distribución de productos que utilizamos en nuestra vida diaria también generan emisiones.

¿Cómo reducir la huella de carbono?

Existen diversas formas en las que podemos reducir nuestra huella de carbono y contribuir a la protección del medio ambiente:

Energías Renovables: Optar por fuentes de energía limpia y renovable, como la solar o la eólica, ayuda a reducir la dependencia de combustibles fósiles.

Movilidad Sostenible: Usar el transporte público, la bicicleta o caminar siempre que sea posible, y optar por vehículos eléctricos si se necesita uno propio.

Eficiencia Energética: Mejorar la eficiencia energética en hogares y negocios, mediante el uso de tecnologías más eficientes y reduciendo el consumo innecesario.

Alimentación Sostenible: Reducir el consumo de carne y optar por dietas más basadas en plantas, así como apoyar a productores locales y prácticas sostenibles.

Reciclaje y Reutilización: Fomentar el reciclaje y la reutilización de materiales para reducir la necesidad de nuevos recursos.